FRASES CÉLEBRES QUE SE DICEN EN EL MUNDO II

Anécdota ocurrida tiempo ha pero que de manera recurrente acude a mi mente, valga la rima. La redacto ahora para que no se pierda en el marasmo de la intrahistoria, que es la historia que afecta a la gente corriente, como diría el enorme Valle Inclán.

4am y laburando en bomberos. Disfrutando de la fase REM, esa en la que cuando suena la alarma estás más roto que un porrón o, en todo caso, roto como él mismo. He visto gente correr sin sentido de un lado a otro de un parque de bomberos y balbuceando palabras y pensamientos inconexos cuando suena la alarma y te pilla en un día de esos que no sabes ni dónde estás. A veces suena y no eres consciente que estás en bomberos hasta pasados un puñado de segundos y, en algunos compañeros, hasta pasados muuuuuuuuuuuuchos segundos. Estos te miran con la mirada vacía esperando una frase o un acto que les devuelva a la realidad y les haga saber si tienen que subirse o no al camión, que parece muy sencillo pero ya os digo que a veces no lo es...

"..auxili persona, obertura de porta..." Salida estandarizada que canta la voz en off del parque y que, la mayoría de las veces, acaba siendo un rescate de un@ ancian@ que por equis motivos está impedido y no atiende a la llamada. Me vienen al pensamiento muchas anécdotas con estos servicios pero me voy a centrar en lo que importa para esta serie de escritos y que son las celebérrimas frases que pueden llegar a ser creadas y espetadas en tu cara por sujetos anónimos... Quizás tendría que empezar otra serie con otro tipo de anécdotas, todo se andará.

Lo primero que solemos hacer al llegar a este tipo de servicios es mirar cómo está la puerta de entrada y ver si tenemos acceso con algún tipo de llave o abriendo con algún "utensilio", para no dar más datos que hay mucho mangui suelto en mi facebook. Si no es posible por ésta ya utilizamos las cuerdas y entramos de alguna manera, hay mil posibles, desde algún piso colindante... No hubo mayores problemas, accedimos desde la puerta abriendo con una radiografía. Entramos el caporal y el menda y aparece andando tranquilamente una señora de mediana edad, que no es ni una edad pequeña ni una edad grande, que ni corta ni perezosa nos suelta a la cara sin ningún miramiento (a nosotros que íbamos con toda la parafernalia que uno se imagina que lleva un bombero): ¿SON USTEDES DE SEGUROS SANTA LUCÍA? ... Casi me cago al retener la inmensa carcajada que se gestó en mi cuerpo ante semejante frase dicha en algún lugar de barcelona y a una intempestiva hora de la madrugada... No señora, no somos de Seguros Santa Lucía venimos de Barrio Sésamo y éste es Don Pimpón y yo soy Espinete... Aisssssssssssssssssssss... ;)

Qué grande es el saber popular.

Salud!!!!