viernes, 8 de marzo de 2013

¿POR QUÉ ESCRIBIR?


Razones para escribir hay muchas, y muchos encontrarán, pese a no poder argumentarlas con cierto criterio razonable, otras tantas para no hacerlo. De la escritura que quería hablar no es la de la lista de la compra o el escrito que tienes que hacer y pegar con celo en la portería cuando hay que convocar una reunión de vecinos si eres presidente de la comunidad. De la escritura que quería hablar es de la que expresa emociones o ideas. Todos, en alguna ocasión, hemos escrito alguna que otra cosa, bien cuando éramos jovencitos y nos enamorábamos perdidamente por primera vez o, simplemente, para desahogarnos en algún mal momento de nuestra vida. Aunque rápido lo olvidamos, en el momento que escribimos, que plasmamos o grafiamos sobre papel esas emociones o ideas apreciamos un curioso bienestar, igual que cuando un amigo nos escucha con sinceridad alguna cuestión que nos atormenta o que es para nosotros importante, o cuando nos pasa algo bueno. Porque todo el mundo sabe que lo mejor de que te pase algo bueno es contarlo. ¿O me diréis que no?


Los seres humanos somos animales de relación. Necesitamos vivir relacionándonos con otros animales humanos para ser felices o, al menos, no perder al humano y quedarnos sólo con el animal. Que haberlos haylos, no nos vamos a engañar.
Para poder vivir con un mínimo de efectiva funcionalidad entre nosotros nos tenemos que comunicar. Eso es impepinable. Nuestro principal sistema de comunicación es el habla. La comunicación verbal es de las primeras cosas que aprendemos y al ser una necesidad para poder sobrevivir no nos presenta una gran dificultad, lo aprendemos a hacer sin estudiar, sencillamente lo aprendemos.

La escritura es algo diferente, podemos decir que es nuestro segundo gran sistema de comunicación, pero aprender a escribir nos supone un esfuerzo mayor y muchas veces acabamos asociándolo a algo tedioso y aburrido, la mayoría de esas veces es por no haber tenido el estímulo necesario que nos permitiera ver que no es aburrido sino placentero. El ejemplo claro lo tenemos aquí, en las redes sociales. Qué si no hacemos en facebook, twitter o  Whatssap. Leer y escribir, en realidad sólo eso. Bueno, también ver fotos.
Las redes, a muchas personas, han sabido crearles ese estímulo. Casi nadie dice te leo o te escribo. Decimos, me ha dicho tal cosa o ha dicho tal otra. Lo asociamos al habla. Ya no parece un trabajo tedioso, ahora nos gusta saber de qué ha hablado éste o qué ha comentado aquél. Las redes sociales han conseguido, en alguna medida, hacernos disfrutar de la comunicación escrita.

Muchas personas habrán tenido la tentación, muchas veces, de expresarse escribiendo algo más que los comentarios o menciones de las redes, como poesía, cuentos, o cosas que se les pasaban por la cabeza pero desisten por vergüenza a cómo suenan sus ideas o emociones cuando llevan sólo unas líneas, pasa como cuando escuchamos nuestra propia voz grabada y nos sentimos ridículos. O avergonzarnos por una mala ortografía. Lo de la ortografía es un mal menor. No es lo mismo tener que aprender ortografía sin que sepas para qué te va a servir que aprenderla por las ganas de maquear o tunear tu idea o emoción. Cuando le coges el gusto al qué escribes la ortografía sólo es el adorno y no cuesta aprenderla. Es como la persona que le gusta cocinar y tiene comensales a los que agradar. Disfruta si la comida es un éxito y al final no le ha sido pesado ni el trabajo ni los adornos. Además, con esta RAE tan moderna que se nos está poniendo, en poco tiempo no habrá que acentuar nada y será mucho más fácil. Hasta "descambiar" lo aceptan, así que ya podéis imaginar.

Una de las mejores cosas que conseguimos al escribir nuestros propios pensamientos es, estimular nuestra imaginación. Imaginad, los que sois padres, que en vez de estar contando siempre los mismos cuentos a vuestros hijos, de vez en cuando los sorprendéis con un arrebato de originalidad y les contáis un cuento que hayáis escrito vosotros. Incluso ayudándoos de su fantasía. Si veis que disfrutan, ahí tendréis vuestro estímulo.
O, ¿quién no ha leído un libro, luego ha visto la película y ésta le parecía una auténtica mierda?

¿Por qué escribir? Pues porque serena, porque ayuda a estimular la imaginación y el ingenio, porque nos ayuda a aclarar y ordenar ideas y emociones, porque permite conocerte un poco mejor a ti mismo y por ende a los demás, y porque te hace un poco más libre.

Hace unos años leí una de esas frases anónimas como las que se cuelgan en las redes, una de esas frases que se pintan en un viejo muro de alguna calle olvidada o en alguna destartalada persiana de garaje, y me caló. Todos tenemos una de esas frases que recordamos sin saber muy bien el porqué. Que simplemente llega y se queda.

"Atrévete y te leerán." (Anonimo)

Escribid! Expresaos con libertad! Atreveos!
Buen camino a todos y no os salgáis de él siempre y cuando seáis vosotros quien lo tracéis.


0 comentarios: